¿Qué es una audiometría y para qué se utiliza?
La pérdida auditiva es un problema de salud que ya alcanza cifras importantes. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se calcula que unos 3 millones de personas, el 8% de la población española, padece este trastorno. Pero muchos no son conscientes del grado de pérdida de oído. La audiometría es una prueba que puede ayudarles.
Una audiometría es un examen con el que se determina el grado de audición de un paciente para comprobar si ha sufrido pérdida auditiva. Esta prueba diagnóstica ayuda al médico a saber cómo se encuentra su oído y si se ha deteriorado su audición.
De esta manera, la audiometría evalúa la capacidad de una persona para escuchar los sonidos y concreta qué fase del proceso de audición puede estar alterada.
Cómo funciona una audiometría
En una audiometría se analizan factores como la tonalidad del sonido y el umbral auditivo del paciente. Para ello, esta prueba se suele realizar de dos formas diferentes:
- Por vía área, gracias al uso de auriculares
- Por vía ósea, con un vibrador que se coloca tras la oreja
Previamente, el médico realizará una inspección de ambos oídos con el otoscopio, para observar si hay anomalías en el interior del conducto auditivo y el tímpano.
Audiometría aérea
En una audiometría aérea, la prueba consiste en taponar un oído del paciente y comprobar que el otro oído es capaz de escuchar una serie de sonidos. Para ello, se ponen unos audífonos en los oídos y se evalua la capacidad auditiva del paciente con diversos sonidos a diferentes intensidades.
Esta operación se realiza primero en un oído y luego en otro, con el objetivo de examinarlos por separado.
Audiometría ósea
Para evaluar la audición por vía ósea se utiliza un objeto que vibre, como un diapasón, que es golpeado suavemente cerca de cada una de las orejas para evaluar la capacidad auditiva por conducción aérea.
A continuación, el especialista vuelve a golpear el diapasón y lo pone en el hueso mastoideo, detrás de cada oído. De esta forma, se comprueba qué tal funciona la conducción ósea del sonido.
¿Qué dolencias detecta una audiometría?
La pérdida de capacidad auditiva puede ser síntoma de diversos problemas de salud relacionados con el oído. No obstante, suele ser el método más adecuado para detectar la hipoacusia a una edad temprana.
En cualquier caso, es recomendable realizarse una audiometría cuando sospechamos que tenemos una pérdida de audición. Incluso, hay etapas en las que esta prueba es recomendable sin que nos hayamos percatado de estos problemas, porque permite de detectar una pérdida de audición en fases tempranas, como ocurre con los recién nacidos y las personas mayores de 65 años.
Además, es aconsejable hacer un seguimiento del nivel de audición de una persona tras pasar enfermedades de riesgo, como la meningitis (sobre todo en niños) o graves otitis. También los traumas craneoencefálicos están entre las causas más habituales de sordera, que se produce en ocasiones como secuela de enfermedades o accidentes.
Reservar cita para hacerse una audiometría
Entre las ventajas de las audiometrías destaca que el médico especialista que realiza la prueba puede interpretar los resultados en el momento de hacerla, e incluso recomendar algún tratamiento. Sin duda, es una prueba diagnóstica muy sencilla, que nos da una rápida respuesta a la hora de buscar la causa de una pérdida de audición.
No obstante, las listas de espera de la sanidad pública y los costes de un seguro médico pueden ser un inconveniente para realizarnos una audiometría. Ante esta situación, te recomendamos que pruebes nuestra web de servicios médicos privados para reservar cita con un otorrino y accedas fácilmente a esta prueba.
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