Esguince de tobillo: Consejos para acelerar su rehabilitación

Esguince de tobillo: Consejos para acelerar su rehabilitación

Entre los deportistas es relativamente frecuente sufrir un esguince en el tobillo, sobre todo al realizar actividades que implican saltos, caídas o cambios de ritmo. Pero también podemos hacernos un esguince realizando las tareas del día a día: un mal paso puede ocasionarnos esta engorrosa lesión. Por eso, desde nuestra tienda de servicios médicos privados hoy te damos algunos consejos que pueden ayudar a que la recuperación de un esguince de tobillo sea lo más rápida y completa posible.

Los esguinces de tobillo y sus tipos

El esguince de tobillo se produce como consecuencia de una distensión de alguno de los ligamentos de esta articulación. Dependiendo de su gravedad, estas lesiones van desde un simple estiramiento hasta desgarros graves y roturas de los ligamentos que sujetan el tobillo. Según el grado de lesión, los síntomas son diferentes. En este tipo de lesiones podemos distinguir:

Esguinces de grado 1

La lesión del ligamento es parcial y no impide al lesionado apoyar el pie cuando camina. Muestra hinchazón e inflamación, y causa dolor, pero es mínimo.

Esguinces de grado 2

En estos casos, el dolor aumenta y se aprecia enrojecimiento y una evidente inflamación, síntomas que pueden llegar a impedir caminar y apoyar el pie. También puede haber síntomas de inestabilidad, debido al desgarro de las fibras del ligamento.

Esguince de grado 3

Es el traumatismo más grave de este tipo, ya que supone la rotura del ligamento. En estos casos, los síntomas son de dolor, enrojecimiento e hinchazón grave, hasta el punto de que la persona que los sufre no puede apoyar el pie ni caminar.

La rehabilitación tras sufrir un esguince de tobillo

En caso de sufrir un esguince, es importante acudir al médico para que un especialista traumatólogo nos haga un chequeo y confirme el diagnóstico. Muchas veces son los servicios de Urgencias los primeros que tratan este tipo de lesiones, y en la mayoría de los casos se recurre al uso de radiografías para determinar la gravedad de la lesión, establecer su tratamiento, y hacer un seguimiento para conseguir su recuperación.

En cualquier caso, existe una medodología que, en la mayoría de los casos, ayuda a la rehabilitación de estas lesiones. Es el método POLICE, unas siglas que en inglés se traducen por Protection, Optimal Loading, Ice, Compression, Elevation. Esta es la secuencia de cuidados que recomienda este método:

Reposo (Protection)

Tras haber sufrido un esguince, se recomienda un periodo de reposo relativo. Conviene aparcar por un tiempo aquellas actividades que puedan causar más daño a los ligamentos del tobillo, aunque no es bueno pasarse: el descanso absoluto puede ser contraproducente y generar problemas como debilidad, rigidez, reducción de la propiocepción, etc.

Carga progresiva (Optimal Loading)

Una de las prácticas que ayuda a la recuperación del tobillo lesionado es la rehabilitación funcional con carga, es decir, hacer ejercicios que ayuden a recuperar la fuerza y las características de los ligamentos lesionados. Caminar con una tobillera puede ser una opción.

No obstante, hay que tener cuidado y no precipitarse y forzar la articulación. Si la carga progresiva es demasiado agresiva puede causar daño al tobillo. En este sentido, es importante que el seguimiento que hace el traumatólogo de la evolución del esguince.

Hielo (Ice)

Para reducir la hinchazón y el dolor propios de un esguince de tobillo, es fundamental aplicar hielo a la zona afectada durante las primeras horas tras el esguince. Asimismo, durante los primeros días, el facultativo puede recomendar la realización de contrastes frío-calor varias veces al día, durante unos 20 minutos, colocando una toalla sobre el hielo.

Vendaje elástico (Compression)

Sujetar el tobillo afectado con un vendaje elástico de compresión ayuda a disminuir la hinchazón y previene la rigidez de la articulación. Salvo excepciones, siempre es mejor que inmobilizar con una férula o una escayola.

Mantener los pies en alto (Elevation)

Al mantener los pies en alto, se favorece que baje la inflamación del tobilla provocada por el esguince.

Seguimiento de un traumatólogo

Al margen de esta metodología, es conveniente que el lesionado se ponga en manos de un facultativo que monitorice su recuperación. La lesión de tobillo puede venir acompañada de otros traumatismos y, por eso, es importante que le vea un médico y, si es posible, que una prueba diagnóstica de imagen confirme la gravedad de la lesión.

Contar con el consejo de los mejores traumatólogos para tratar este tipo de lesiones no siempre es fácil. Ahora, desde nuestra tienda de servicios médicos privados, puedes pedir cita con los mejores especialistas para que hagan un seguimiento de la lesión. Aquí tienes a tu alcance los traumatólogos más prestigiosos, sin necesidad de contratar una póliza.